La nueva iniciativa busca fomentar una movilidad segura a través de la concientización ciudadana y el uso de canales de denuncia
Calcomanías en taxis porteños, acciones institucionales y compromiso colectivo en la lucha contra el acoso callejero
El lunes 2 de octubre, la Ciudad de Buenos Aires dio un paso firme y necesario en la lucha contra el acoso callejero. En conmemoración del Día de la Lucha contra el Acoso Callejero, se presentó una campaña conjunta entre la Secretaría para la Igualdad de Género y la Secretaría de Transporte y Obras Públicas. El eje central de esta iniciativa es visibilizar esta problemática que afecta, principalmente, a mujeres y diversidades, y fomentar el uso de dispositivos para su denuncia.
«Con esta campaña buscamos que cada persona que sufra o presencie una situación de acoso sepa que no está sola, que tiene herramientas para actuar y una Ciudad que la respalda», afirmaron desde el Gobierno porteño.
Un lanzamiento con amplio respaldo institucional
El acto de presentación reunió a varias autoridades del Gobierno de la Ciudad, entre ellas, Carmen Polledo (Secretaría para la Igualdad de Género y Asuntos Institucionales), Manuela López Menéndez (Secretaría de Transporte y Obras Públicas) y Francisco Pérez Martínez (Subsecretario de Gestión de la Movilidad). También participaron Eugenia Wehbe (jefa de gabinete de la Secretaría de Transporte), Natalia Roji (directora general de Gestión Pública para la Igualdad de Género) y Carolina Barone (directora general de la Mujer), junto a representantes del sector de taxistas. La presencia de los trabajadores del volante no fue casual: la campaña apunta a que todos los taxis de la Ciudad lleven calcomanías con información clara y accesible sobre cómo denunciar el acoso callejero. De este modo, se transforman en verdaderos agentes móviles de prevención, concientización y empoderamiento ciudadano.
Una acción concreta para visibilizar y prevenir
Las calcomanías incluyen datos clave sobre los canales de denuncia disponibles, tanto presenciales como virtuales, y apelan a generar conciencia sobre un fenómeno que, muchas veces, es naturalizado. Se busca que quienes viajan en taxi o simplemente circulan por la Ciudad sepan que pueden y deben actuar ante una situación de acoso. La iniciativa refuerza un mensaje claro: el espacio público es de todas y todos, y debe poder disfrutarse sin miedo, sin incomodidades, sin violencias.
Un taxi, miles de mensajes al día
Buenos Aires cuenta con más de 35 mil taxis en circulación. Este medio de transporte, tan representativo de la vida urbana porteña, se convierte así en una poderosa herramienta de comunicación. Cada taxi puede llevar este mensaje a cientos de personas por día, alcanzando no solo a vecinos y vecinas, sino también a turistas que visitan la Ciudad. Con esta campaña, se busca generar un cambio cultural profundo y sostenido en el tiempo, donde cada actor social asuma su rol en la construcción de una Ciudad más segura e igualitaria.
El acoso callejero: una problemática social que no debe silenciarse
El acoso callejero es una forma de violencia que se expresa en piropos no deseados, miradas intimidantes, comentarios fuera de lugar, persecuciones, roces, y hasta situaciones de violencia física. Aunque durante mucho tiempo fue invisibilizado o relativizado, hoy se reconoce como una forma concreta de violencia de género. Desde el Estado porteño se sostiene que visibilizar esta problemática y brindar herramientas para combatirla es parte del compromiso institucional con la igualdad de género y el respeto por los derechos humanos.
Cómo denunciar el acoso callejero
Quienes sufran o presencien situaciones de acoso callejero pueden: Llamar al 144, línea gratuita de atención, disponible las 24 horas. Utilizar el chat de la Ciudad (en WhatsApp: +54 9 11 5050 0147). Acudir a una Comisaría Comunal o de la Mujer. Presentar una denuncia en la web de la Defensoría del Pueblo o en el Ministerio Público Fiscal.
Un llamado a la acción colectiva
Desde el Gobierno de la Ciudad, invitan a todos los vecinos y vecinas a involucrarse activamente en esta campaña. Ya sea a través de la difusión, el uso de los canales de denuncia, o simplemente prestando atención y actuando cuando alguien necesita ayuda, cada gesto suma. Porque una Ciudad más segura se construye entre todos, y el primer paso para erradicar el acoso callejero es no callarse más.