Del 14 al 15 de febrero, Buenos Aires celebró el inicio del año del Dragón de Madera con danzas, gastronomía y cultura en el Barrio Chino y puntos icónicos de la ciudad

Durante los días 14 y 15 de febrero, Buenos Aires se vistió de rojo y dorado para dar la bienvenida al Año Nuevo Chino 2024, el año del Dragón de Madera. Con actividades que se extendieron por todo el Barrio Chino de Belgrano y otros puntos de la Ciudad, las celebraciones combinaron tradición, gastronomía, arte y un mensaje de unidad cultural.

Una fiesta que ya es tradición porteña

La celebración del Año Nuevo Chino se ha convertido en un clásico de la agenda cultural porteña. Miles de vecinos y turistas se acercaron al Barrio Chino para disfrutar de los tradicionales desfiles, espectáculos de danzas del león y el dragón, shows de artes marciales y muestras culturales.

Las calles Arribeños, Mendoza y las aledañas se transformaron en un gran escenario a cielo abierto. Allí, los visitantes pudieron degustar platos típicos, participar en talleres de caligrafía, juegos tradicionales y conocer más sobre la astrología china.

Además, en esta edición, monumentos emblemáticos como la Torre Monumental y el Puente de la Mujer se iluminaron de rojo, simbolizando la buena fortuna y la felicidad que augura el nuevo año para las comunidades.

Gastronomía, cultura y una comunidad integrada

Los puestos gastronómicos ofrecieron delicias típicas como los dim sum, los fideos de la longevidad, el tradicional pato laqueado y postres orientales, atrayendo a familias completas y grupos de amigos que disfrutaron de la variedad de sabores.

Más allá de la comida, la propuesta buscó fortalecer el lazo entre la comunidad china y los porteños, promoviendo el respeto y la valoración de las distintas culturas que conviven en la ciudad.

La programación incluyó espectáculos musicales, intervenciones artísticas en las plazas y la ya clásica caravana de los dragones, que recorrió el barrio saludando a grandes y chicos.

“El Barrio Chino se convirtió en un puente entre culturas y una postal del encuentro de los vecinos”, comentó uno de los organizadores mientras se desarrollaba la caravana.

Una ciudad que celebra la diversidad

La propuesta, organizada por la Asociación Cultural Chino-Argentina y con el apoyo del Ente de Turismo de la Ciudad, reafirmó a Buenos Aires como una ciudad abierta al mundo, que celebra sus comunidades y su diversidad cultural.

El evento no solo atrajo a quienes tienen raíces orientales, sino también a miles de vecinos de otros barrios y turistas curiosos por conocer más sobre la cultura china.

Desde la organización destacaron el impacto positivo en el comercio barrial, ya que los festejos impulsaron la actividad gastronómica y comercial durante toda la semana.

El dragón seguirá recorriendo la ciudad

Aunque el epicentro de la celebración fue Belgrano, en otros puntos de la ciudad también se realizaron actividades alusivas al Año Nuevo Chino, incluyendo espectáculos en la Usina del Arte y paseos culturales guiados por diferentes barrios.

Los organizadores adelantaron que durante el año continuarán las actividades culturales conjuntas entre la comunidad china y los barrios porteños, como talleres, muestras gastronómicas y celebraciones especiales.

 

Por Pablo L.