Talleres, estudios y galerías locales ofrecieron visitas, muestras y actividades gratuitas para vecinos y visitantes
Una movida cultural que llenó de arte las calles de la Comuna 15
El pasado sábado 18 de mayo, las calles de Chacarita, Villa Ortúzar y Parque Chas se transformaron en un gran paseo cultural gracias al circuito barrial organizado por artistas, gestores y espacios independientes.
Durante toda la jornada, talleres de arte, estudios fotográficos, galerías, espacios de diseño y tiendas culturales abrieron sus puertas al público, ofreciendo actividades gratuitas, exposiciones, charlas y muestras en vivo.
La propuesta, impulsada por la comunidad artística local con el apoyo de organizaciones culturales barriales, buscó acercar el arte a los vecinos y poner en valor la enorme producción cultural que existe en la Comuna 15, muchas veces invisible para quienes no están vinculados al circuito artístico.
Un recorrido a puro arte y encuentro vecinal
Los espacios participantes armaron un verdadero recorrido cultural a pie, donde los vecinos pudieron pasar de un taller de pintura a un estudio de cerámica, visitar una galería fotográfica y terminar la tarde en una feria de diseño independiente.
Entre los lugares más destacados estuvieron Estudio Amapola (cerámica y arte), Galería Cuarto Oscuro (fotografía y talleres), Espacio Matienzo (arte y música) y varios estudios de diseño y producción local que forman parte del entramado creativo de la zona.
“Queríamos abrir nuestros espacios, mostrar lo que hacemos y compartirlo con el barrio. La cultura se vive y se construye entre todos”, señalaron los organizadores del evento
Además de las muestras y visitas, la jornada incluyó música en vivo, talleres participativos, charlas con artistas y ferias de publicaciones independientes. Las actividades fueron gratuitas y abiertas a todo público, lo que permitió que vecinos de todas las edades pudieran disfrutar del circuito.
El barrio como escenario y punto de encuentro cultural
El éxito del circuito cultural radicó en su espíritu abierto, comunitario y barrial. No hubo grandes escenarios ni producciones desmedidas: la propuesta fue simple y poderosa a la vez. Las puertas abiertas, las calles llenas de gente y la cercanía entre artistas y vecinos generaron un clima de verdadero encuentro.
Los propios organizadores remarcaron que esta iniciativa nació como una respuesta a la necesidad de conectar el trabajo artístico con la comunidad y de revalorizar la identidad cultural de la Comuna 15.
Los vecinos, por su parte, destacaron la posibilidad de conocer espacios que muchas veces pasan desapercibidos y la alegría de compartir un día distinto, donde la cultura fue la protagonista en las calles del barrio.
Un circuito que promete quedarse en el calendario cultural barrial
Tras el éxito de esta edición, los organizadores anunciaron su intención de repetir la experiencia y consolidar el circuito como una actividad regular en la agenda cultural de la Comuna 15.
El objetivo es seguir sumando espacios, artistas y vecinos, y que el circuito cultural se convierta en un clásico del barrio, donde cada edición sea una fiesta abierta al arte, la creatividad y la comunidad.
Porque cuando la cultura sale a la calle y se vive de cerca, el barrio entero se transforma en un escenario donde todos tienen un lugar.