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Más de 2.800 autos abandonados fueron compactados por el Gobierno porteño

Un problema urbano que afecta a la salud, la seguridad y el ambiente

El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires ha llevado a cabo un importante operativo para la compactación de vehículos abandonados en la vía pública, respondiendo a una de las mayores preocupaciones de los vecinos. En lo que va del año, la Ciudad ha retirado y compactado más de 2.800 autos que habían sido dejados en las calles, acumulándose como chatarra y representando un peligro para la salud, la seguridad y el medio ambiente.

Una respuesta a las denuncias vecinales

Los autos abandonados no solo ocupan espacio público, sino que también representan un foco de problemas. Según Jorge Macri, Jefe de Gobierno porteño, estas unidades se convierten en lugares propicios para la acumulación de agua, generando criaderos de mosquitos transmisores de enfermedades como el dengue. Además, pueden ser utilizados por personas sin hogar para instalarse, lo que agrava la situación.

Macri explicó que el retiro de estos vehículos es una de las demandas principales de los ciudadanos, quienes a menudo realizan sus denuncias a través del chat de la Ciudad (BOTI) o el sistema BA 147. El jefe de Gobierno enfatizó la importancia de estas acciones: “Ya levantamos de la calle más autos que en todo el año pasado. Asumimos el compromiso de ordenar la Ciudad y los autos abandonados son un problema habitual”.

El proceso de compactación: un esfuerzo coordinado

El operativo de retiro y compactación de vehículos forma parte del Programa de Descontaminación, Compactación y Disposición Final de Automotores (PROCOM), dirigido por Leandro Iribas. Este programa tiene como objetivo descontaminar los vehículos abandonados antes de su destrucción, quitando todos los líquidos peligrosos, baterías y componentes contaminantes, como los equipos de gas, para asegurar que el proceso no genere un impacto negativo en el ambiente.

El desguace y compactación se realizan en la planta de Mataderos, donde luego se entrega el material ferroso a la empresa siderúrgica Acindar. Esta compañía se encarga de la fundición del material, y como parte de un acuerdo con el gobierno porteño, destina el 5% del valor del material recuperado a la Ciudad y un 2% a una entidad benéfica.

Más de 250 vehículos retirados por mes

El volumen de vehículos retirados por el gobierno de la Ciudad es significativo, con más de 250 autos removidos de las calles cada mes. En los últimos dos años, esta acción ha permitido recuperar más de 5 millones de kilos de chatarra, contribuyendo a liberar espacio en la vía pública y reducir el riesgo de accidentes y problemas de salud relacionados con la acumulación de residuos peligrosos.

Las comunas del sur de la Ciudad de Buenos Aires, según los datos proporcionados por el Gobierno, son las que más vehículos abandonados presentan. Esto refleja una problemática que, si bien se extiende a otras áreas, afecta de manera más notable a estas zonas.

Cómo denunciar un auto abandonado

Para retirar un auto abandonado de la vía pública, la Ciudad actúa de oficio o a través de las denuncias realizadas por los vecinos. El procedimiento es sencillo: se puede reportar el vehículo abandonado mediante la aplicación BA 147 o a través de BOTI, el chatbot de la Ciudad, al número 11-5050-0147. Los ciudadanos deben cargar dos fotos del vehículo que muestren claramente su estado y la patente, en caso de que esté visible.

Una vez que se realiza la denuncia, un inspector de la Comuna se acerca al lugar, labra un acta y adhiere un cartel en el vehículo que informa al propietario que tiene un plazo de 10 días para retirar o poner en condiciones el automóvil. Si pasado este tiempo el dueño no cumple con la advertencia, se emite una segunda notificación, otorgando 15 días adicionales. Si el propietario sigue sin responder, el vehículo es removido de manera definitiva.

El impacto ambiental de los autos abandonados

Los vehículos abandonados no solo representan un obstáculo en la vía pública, sino que también son una amenaza para el medio ambiente. La presencia de baterías, combustibles y otros líquidos contaminantes dentro de los autos deteriorados puede filtrarse al suelo y generar un grave impacto en el ecosistema urbano. Por esta razón, el proceso de descontaminación previo a la compactación es un paso fundamental en la gestión de los vehículos abandonados.

Un compromiso con el orden urbano

La Ciudad de Buenos Aires ha asumido un compromiso con el orden y la limpieza del espacio público. Jorge Macri, junto con el ministro de Seguridad Waldo Wolff y el secretario de Seguridad Diego Kravetz, supervisaron personalmente las tareas del PROCOM para garantizar que se cumpla con los objetivos trazados. El subsecretario de Relaciones con la Comunidad y Atención a la Víctima, Ezequiel Daglio, también participó de este operativo, subrayando la importancia de trabajar en conjunto con los vecinos para mejorar la calidad de vida en la Ciudad.

Este esfuerzo por remover los autos abandonados no solo busca liberar espacio en la vía pública, sino también contribuir a la seguridad y el bienestar de todos los porteños, asegurando un entorno urbano más limpio, seguro y saludable.