Un paso concreto para fomentar la empleabilidad inclusiva en la Ciudad de Buenos Aires

El 24 de septiembre, la Legislatura porteña fue escenario del lanzamiento del Protocolo para la contratación de personas con discapacidad, una iniciativa presentada por la Red ProBono del Colegio de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires, en colaboración con estudios jurídicos y departamentos legales de distintas empresas.

El objetivo central del Protocolo es brindar a las empresas herramientas claras para contratar personas con discapacidad, comprender la normativa vigente y conocer los beneficios que esta acción genera tanto para las organizaciones como para los trabajadores.

Principales ejes del Protocolo

El documento recopila definiciones y prácticas que acompañan a las empresas durante todo el proceso de contratación. Entre los aspectos más destacados se encuentran la eliminación de barreras físicas, culturales y organizacionales que dificultan la incorporación laboral de personas con discapacidad.

Se establecen procedimientos claros para la selección, contratación y acompañamiento de los trabajadores, junto con recomendaciones sobre ajustes razonables y accesibilidad en los espacios de trabajo, asegurando que todos puedan desempeñarse de manera plena.

Otro eje clave es la capacitación y sensibilización de los equipos, fomentando entornos inclusivos donde la diversidad se valore como un recurso que fortalece a la organización.

El seguimiento y la evaluación continua son esenciales para garantizar la permanencia laboral y asegurar que las adaptaciones necesarias se mantengan, consolidando un ciclo de inclusión sostenible.

Impacto y reflexiones durante el lanzamiento

Referentes de empresas, organizaciones de la sociedad civil y personas con discapacidad coincidieron en que una cultura inclusiva transforma vidas y fortalece a las instituciones. La jornada mostró cómo la inclusión no solo beneficia a quienes ingresan al mundo laboral, sino que enriquece a toda la comunidad laboral.

Durante la presentación se destacó que el Protocolo también busca derribar miedos y prejuicios, tanto de las personas con discapacidad como de los empleadores, quienes muchas veces desconocen las adaptaciones y beneficios disponibles.

Se recordaron incentivos vigentes, como la posibilidad de deducciones en el Impuesto a las Ganancias y ayudas estatales que facilitan la contratación, subrayando el carácter práctico y aplicable del Protocolo en el día a día de las empresas.

El evento puso de relieve la importancia de la articulación entre el Estado, empresas y organizaciones de la sociedad civil, señalando que la transformación hacia la inclusión requiere del compromiso conjunto de todos los sectores.

Con esta herramienta, la Ciudad da un paso firme para que la empleabilidad de personas con discapacidad sea más accesible, transparente y efectiva, construyendo un entorno laboral más justo y diverso.

 

Por Pablo L.