Una carrera inédita que unió la pasión del atletismo con la pista más famosa del automovilismo argentino
Un escenario único para los 15k
“Promovemos al sur de la Ciudad como polo de grandes eventos”
Fue una competencia diferente: los 15k en el Autódromo Oscar y Juan Gálvez, en Villa Lugano, pusieron a correr juntos a amateurs y profesionales en un circuito que, hasta ahora, era territorio exclusivo de autos de carrera.
La largada fue a las 8 de la mañana, con la pista teñida de una marea naranja de atletas. La partida se dio desde la recta principal del autódromo, para luego tomar por las avenidas 27 de Febrero y Roca, rodeando el predio y volviendo a la “catedral del automovilismo” para la llegada.
El trazado combinó la emoción de correr en un lugar histórico con el desafío de mantener un ritmo parejo. La superficie lisa y ancha de la pista permitió velocidad, mientras que los tramos por las avenidas ofrecieron un aire más callejero, con el público alentando desde las veredas.
Ganadores y tiempos destacados
En mujeres, la ganadora fue Chiara Milena Mainetti, que completó el recorrido en 50 minutos y 47 segundos. En hombres, el primer lugar fue para Ignacio Erario, con un tiempo de 44 minutos y 48 segundos.
Más allá de los podios, el evento convocó a cientos de corredores que buscaban la experiencia única de poner un pie —y las zapatillas— en el asfalto donde corrieron ídolos del automovilismo como Fangio, Traverso o el propio Juan María Traverso.
Un impulso al sur de la Ciudad
El Jefe de Gobierno, Jorge Macri, destacó que este tipo de eventos forma parte de un plan para impulsar el sur porteño como espacio para grandes espectáculos deportivos y culturales.
“Promovemos al sur de la Ciudad como polo de grandes eventos dentro de un ambicioso plan de desarrollo urbano, para que siga creciendo”, dijo Macri, resaltando que este tipo de competencias acercan movimiento económico, turismo y visibilidad a la zona.
Triple Corona y próximos desafíos
El secretario de Deportes, Fabián “Chino” Turnes, recordó que esta carrera completa la llamada Triple Corona de la Ciudad, junto con los 21k y los 42k de Buenos Aires que se correrán en agosto y septiembre, respectivamente.
Para los amantes del running, es la oportunidad de medirse en tres distancias icónicas en escenarios distintos, con el agregado de que los 15k en el autódromo son una novedad que difícilmente se repita cada año.
La jornada dejó claro que el running porteño está más vivo que nunca y que la ciudad busca innovar en sus propuestas deportivas, mezclando tradición, nuevos espacios y un público cada vez más apasionado.