La Plaza Olivera estrenó un patio de juegos temático que combina historia, diversión y accesibilidad para toda la familia

Un rincón medieval en plena Ciudad

En el corazón de Parque Avellaneda, la Plaza Olivera se vistió de época con la llegada de un nuevo espacio lúdico. El patio de juegos fue renovado con un diseño inspirado en la Edad Media, donde un gran castillo de madera y hierro invita a los chicos a dejar volar su imaginación.

La idea surgió de un guiño a la historia barrial: el predio donde hoy está la plaza fue parte de la antigua chacra «Los Remedios», propiedad de la familia de don Domingo Olivera. El vínculo entre la familia y referencias históricas europeas motivó el estilo medieval que ahora decora el lugar.

El imponente mangrullo es la estrella del patio: su forma de castillo medieval se integra con el entorno verde y se complementa con zonas para todas las edades. El diseño respeta criterios de seguridad, accesibilidad y diversión, logrando un equilibrio que enamora a grandes y chicos.

Un patio pensado para todos

El área de juegos fue ampliada y organizada en dos sectores: uno más tranquilo para los más pequeños, con arenero, solados blandos y colores que estimulan los sentidos; y otro con propuestas más dinámicas, como juegos de destreza y agilidad para los más grandes.

No podían faltar las hamacas, que están ubicadas en un pórtico seguro y resistente. Además, el espacio cuenta con un tabique perimetral con vegetación nativa que separa visual y físicamente el patio de la avenida, generando un ambiente seguro y contenido.

La plaza también sumó nuevos caminos y mobiliario urbano, con un diseño paisajístico que respeta la superficie absorbente y mejora la circulación. Parte de la granza se reemplazó por hormigón peinado con césped a los costados, para que todos puedan moverse con comodidad.

“El patio de Plaza Olivera es un ejemplo de cómo el diseño puede unir identidad barrial y juego”

Una Ciudad que renueva sus plazas

La apertura de este castillo forma parte de un plan más grande: la Ciudad está renovando 104 espacios verdes en 2024, con más de 30 proyectos de patios de juegos nuevos o renovados. El objetivo es claro: que todos los chicos, sin importar sus habilidades, tengan un lugar para jugar y compartir.

En estos proyectos, la inclusión es clave. Se diseñan zonas con distintos niveles de complejidad para que cada niño pueda elegir cómo y dónde jugar según su edad, intereses o capacidades. También se incorporan “Espacios de Calma” para quienes necesitan un entorno más sereno.

El ministro de Espacio Público e Higiene Urbana, Ignacio Baistrocchi, destacó que la renovación apunta a patios más seguros, inclusivos y creativos. La Plaza Olivera, con su toque medieval, es una muestra de cómo el juego puede convivir con la historia y la identidad barrial.

Los vecinos ya se acercan con sus familias, y los chicos disfrutan cada rincón del castillo. Parque Avellaneda suma así un nuevo motivo para reunir a la comunidad y disfrutar del aire libre en un entorno pensado para ellos.

Más allá de la novedad, el patio de Plaza Olivera es un recordatorio de que la Ciudad también puede ser un lugar para soñar, donde la imaginación y el juego son protagonistas y donde la historia se reinventa en clave de diversión.

 

Por Pablo L.