Después de la decisión oficial de la policía de Guernsey de abandonar la búsqueda de Emiliano Sala y del piloto que viajaban en el avión que desapareció hace una semana, la familia se puso a cargo y no dejan de buscarlos. Este lunes, con condiciones climáticas favorables, pudieron sobrevolar la zona en la que se perdió el contacto con la aeronave.
Aferrados a la esperanza, la familia y los amigos de Emiliano Sala dieron un paso más en la búsqueda privada. El día de hoy por caso, su madre y su hermana alquilaron un avión con lo recaudado en la movida solidaria vía web y sobrevolaron la zona en la que el futbolista argentino y el piloto perdieron contacto con los radares.
Acompañados por David Barker (jefe del operativo del rastreo público), David Mearns (oceanógrafo y científico marino, quien está a cargo de la operación privada) y un equipo de búsqueda, los familiares de Emiliano recorrieron vía aérea la zona en la que la nave en la que viajaba Sala desapareció misteriosamente. Y luego, también volaron por encima de la deshabitada Isla de Burhou y los islotes de Ramonquet, Orcat y Casquettes, en el Canal de la Mancha.
Según informó el propio Mearns, la búsqueda privada que contrató la familia Sala se diferencia de la que ya se realizó hace unos días porque ahora “se incluirán actividades bajo el agua”. Y en ese contexto, surgieron algunas complicaciones.
Darío Sala, hermano de Emiliano, dejó en claro cuál es el deseo de todos ellos: “Vamos por el milagro. Sabemos que la fe y la esperanza hacen milagros y esperamos uno”
¿De qué se trata? El rastreo submarino se ve, en cierto punto, amenazado por bombas no detonadas que datan de la Segunda Guerra Mundial. Y según trascendió, el jefe del operativo privado buscará el avión en el que viajaba Sala en la fosa Hurd Deep, un abismal valle submarino de 180 metros de profundidad, donde se encuentran desechos nucleares de la Primera y Segunda Guerra Mundial. Además, en esa fosa también se hundió el submarino HMS Affray (1951, fallecieron 75 personas).