Se viven horas de ansiedad y alegría en la intimidad del plantel de Racing. Todos estuvieron conectados desde temprano a través del WhatsApp. Los jugadores, por un lado; los dirigentes, por el otro. Se celebró el triunfo de Patronato sobre Defensa y Justicia y esa distancia que dejó al líder cuatro puntos por encima de su incansable perseguidor.
La certeza de que será campeón ganando en Victoria ante Tigre llevó tranquilidad. Y ahora mismo, mientras el equipo se tomará 48 horas de descanso para volver el martes a los entrenamientos, el presidente del club de Avellaneda, Víctor Blanco, está evaluando la mejor opción para los hinchas de cara a un partido clave en rodeo ajeno.
“Vamos a pedir que haya visitantes en Victoria, pero no depende de nosotros; hay que hablar con las autoridades de la Policía bonaerense y con la APreVide”, le dijo el presidente de la Academia. No obstante, Blanco ni siquiera llegará hacer el pedido formal a la Superliga.
“No hay ninguna posibilidad. Ni de cambiar de estadio, como se rumoreó, ni de que Racing traiga visitantes. Vamos a jugar en nuestro estadio con gente de Tigre solamente. Hagan lo que hagan, pidan lo que pidan, nos vamos a ajustar a nuestro derecho de hacerlo de esta manera. No haremos lugar a ninguno de esos pedidos. Vamos a priorizar nuestra situación”, le dijo Ezequiel Melaraña, mandamás del club de Victoria.
El Matador se juega la permanencia y necesitará el apoyo popular. De cualquier modo, en Racing tampoco estaban convencidos de que la mejor idea fuera trasladar a su gente. “Por más que haya hinchas visitantes, ¿cuántos lugares nos van a dar? ¿Cuatro mil, cinco mil? Ellos se pueden ir al descenso y puede haber problemas”, confió un allegado a la Comisión Directiva.
Otro tema que preocupaba era la venta de estas entradas. Más allá de que se podía haber realizado a través del sistema online, el club tiene 70 mil socios. Habrá demasiada demanda para tan pocos sitios en la tribuna del José Dellagiovana.
Bajo esta coyuntura, no se descarta ubicar una pantalla gigante en el Cilindro para que la gente copie el estadio y puedan vivir las alternativas del partido ante Tigre, como ocurrió en el Apertura 2001. Aquella tarde del 27 de diciembre, Racing definió el título en Liniers y abrió su estadio. La APreVide (la Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte) ya confirmó que se encargará del operativo.
“Los dirigentes de Tigre no aceptaron que haya público de Racing y nosotros nos acompañamos su decisión, a pesar de que en la gestión del ministro Cristian Ritondo se juega con hinchas visitantes”, le dijo Juan Manuel Lugones.
El titular de la APreVide, además, aseguró que no habrá inconvenientes si Racing quiere abrir el estadio para su gente. El partido con Tigre se jugará el domingo 31 de marzo. Será en simultáneo con el duelo que Defensa y Justicia afrontará ante Unión en Florencio Varela. Todavía no está resuelto el horario.
En cuanto a la última fecha, independientemente del resultado, Racing no lo hizo público, pero no tiene pensado acceder al pedido de José Lemme, presidente del Halcón, quien pretende la presencia de público visitante. Sólo habrá socios locales.