Reclaman dos francos semanales “con el objetivo de reducir la exposición a múltiples factores insalubres y nocivos”. AGTSyP informó que una hora antes se liberarán los accesos a esas líneas y darán una conferencia de prensa.
Integrantes de Asociación gremial de trabajadores del Subterráneo y Premetro (AGTSyP) anunciaron este sábado que el próximo lunes llevarán a cabo una medida de fuerza que paralizará el servicio de las líneas B y C del subterráneo de la Ciudad de Buenos Aires entre las 14 y las 16, en reclamo de una “dos francos semanales con el objetivo de reducir la exposición de los trabajadores a múltiples factores insalubres y nocivos”.
A través de un comunicado, el sindicato informó que desde las 13, se liberarán los accesos a esas líneas y recibirán a los medios de prensa en la estación Juan Manuel de Rosas de la línea B para detallar el alcance de la medida de fuerza.
“A las condiciones dañinas para la salud inherentes a nuestro ámbito de trabajo (alteración de ritmos circadianos, microondas, electromagnetismo, microparticulados minerales y metálicos en suspensión, enrarecimiento del aire y falta de oxigeno entre otros) se le suma la presencia del cancerígeno asbesto en toda la red”, señalaron desde la organización sindical.
En ese sentido, indicaron que “el asbesto es un elemento prohibido por ley, en su venta y comercialización, y que tiene consecuencias fatales para el cuerpo humano que resulta expuesto a este mineral”.
“Desde la AGTSyP hemos presentado un amparo colectivo exigiendo el retiro inmediato del asbesto y todos los elementos contaminados de la red de subterráneos, incluidos los trenes de la línea B, E y C que lo contienen, que ha sido concedido y ratificado por la justicia porteña”, apuntaron.
Los trabajadores aseguraron que ya suman tres los trabajadores fallecidos por asbestosis y hay más de 80 afectados por el mineral cancerígeno.
“Esta realidad afecta, y pone en riesgo también, a los millones de usuarios que utilizan el transporte subterráneo todos los días. Como ya lo hemos denunciado, una verdadera crisis sanitaria bajo tierra a la que el Gobierno de la Ciudad y Emova esconden y niegan en forma criminal. Seguimos exigiendo la reducción de la jornada semanal, la desabestización inmediata de toda la red y el cambio de las flotas contaminadas”, remarcaron.
Los trabajadores anticiparon que continuarán con las medidas de fuerza “hasta obtener la respuesta que permita salvaguardar” la salud de los empleados del subterráneo y los usuarios”.