La medida comenzó a regir a fines de julio y busca aliviar el bolsillo de los vecinos y agilizar gestiones

Un alivio para el bolsillo de los conductores

Desde fines de julio, los vecinos de la Ciudad tuvieron un respiro al momento de hacer trámites para su licencia de conducir. El Gobierno porteño eliminó el costo de tres gestiones clave, una decisión que benefició directamente a quienes renovaron o realizaron trámites especiales para manejar.

La Legislatura porteña aprobó una ley enviada por el Ejecutivo que quitó el valor de 71 trámites administrativos. Entre ellos, se destacaron tres directamente vinculados con el registro de conducir: dos estudios complementarios (neuropsicológico y psicodiagnóstico) y el certificado de legalidad. Hasta ese momento, estos trámites implicaban un gasto considerable para quienes los necesitaban.

Qué cambió desde entonces

Los estudios neuropsicológico y psicodiagnóstico costaban hasta ese momento $14.630. Estos exámenes se pedían solo en casos puntuales, cuando durante la evaluación psicológica surgía la necesidad de hacer un análisis más profundo para garantizar que la persona estuviera apta para conducir.

El tercer trámite que pasó a ser gratuito fue el certificado de legalidad. Este documento, que tenía un valor de $7.320, acredita el historial de la licencia de conducir de una persona. Era habitual que lo solicitaran quienes cambiaban de jurisdicción o necesitaban demostrar sus antecedentes de manejo en otra autoridad.

“Desde la Ciudad buscamos reducir y aliviar la carga monetaria a quienes invierten y generan nuevos puestos de trabajo y también allanar el camino a aquellos emprendedores y comerciantes que quieran introducirse en el sector productivo” (Jorge Macri)

Un ahorro para miles de vecinos

Según cálculos oficiales, unos 2.200 vecinos por mes se vieron beneficiados por la eliminación de estos costos. No solo significó un ahorro económico, sino también una simplificación de los pasos para obtener o renovar la licencia.

Hasta antes de la medida, para quienes recibían la indicación de realizar estos estudios complementarios, el gasto extra era un verdadero dolor de cabeza. Con esta disposición, no solo desapareció el costo, sino que también se agilizó el circuito administrativo, evitando trámites engorrosos.

Un paquete más amplio de beneficios

Esta acción formó parte de una estrategia más amplia. El Gobierno de la Ciudad eliminó el costo de un total de 71 trámites, muchos de ellos vinculados a emprendedores, PyMEs y comerciantes que necesitan habilitaciones o certificados para operar.

El objetivo fue claro: facilitar gestiones, reducir burocracia y, sobre todo, aliviar la carga económica que muchas veces frena proyectos o complica a quienes ya están trabajando en la formalidad. En ese sentido, las autoridades remarcaron que la simplificación de trámites es clave para una ciudad más ágil y moderna.

Un paso hacia trámites más accesibles

La eliminación de estos costos no fue un hecho aislado. Se enmarcó en un plan para digitalizar y simplificar la mayor cantidad posible de trámites, evitando que los vecinos tengan que gastar tiempo y dinero en gestiones repetitivas o innecesarias.

En el caso de la licencia de conducir, esto significó no solo menos gastos, sino también menos pasos a seguir. De esta forma, se buscó que renovar o tramitar la licencia fuera un proceso rápido, claro y accesible para todos.

Más cerca de los vecinos

El jefe de Gobierno, Jorge Macri, destacó que la medida respondió a un pedido concreto de los vecinos: tener un Estado más cercano y menos burocrático. Además, remarcó que el ahorro que significó esta medida fue especialmente importante para quienes dependen del auto o la moto para trabajar.

La decisión buscó que el vecino sintiera que la gestión pública no es una traba, sino un apoyo para su vida cotidiana. Y que los trámites, en lugar de ser un gasto más, sean un servicio al alcance de todos.

Por Pablo L.