Maximiliano Levy, el ex barra brava de Boca que enero de este año fue electo presidente de Almirante Brown, fue designado este jueves como presidente de la Mesa de la Primera B Metropolitana. Levy reemplaza en el cargo a Jorge Barrios, titular de Estudiantes de Caseros, quien además es vocal suplente del Comité Ejecutivo de la AFA y presidente del fútbol femenino.
El nombramiento no deja de llamar la atención ya que Levy tenía, desde febrero de este año, derecho de admisión aplicado por la Agencia de Prevención de Violencia en el Deporte (ApreViDe) que dirige Juan Manuel Lugones. La prohibición, publicada en Boletín Oficial, era por un año, es decir, hasta febrero de 2020. Sin embargo, se la levantaron.
«La Justicia determinó que está sobreseído», explicó el titular del organismo, Juan Manuel Lugones.
El cargo le permitirá a Levy formar parte en un futuro de las reuniones del Comité Ejecutivo de la AFA. Además, podrá estar en las asambleas de AFA, ya que la B Metropolitana tiene 5 delegados. En una Asamblea extraordinaria se elige al presidente de la entidad. Así fue designado Claudio Tapia, que alguna vez ocupó el cargo de presidente de la B Metropolitana como titular de Barracas Central.
En 2013, Levy fue detenido cuando volvía de ver un partido de Boca en Ecuador por un supuesto encubrimiento agravado a Maximiliano Mazzaro, quien por entonces era uno de los líderes de la barra, ya que este se encontraba prófugo de la justicia.
Mazzaro había sido acusado del asesinato de Ernesto Cirino, un vecino de Liniers atacado a golpes la noche del 29 de agosto de 2011 tras una discusión doméstica en la que participaron barras de Boca y Cirino.
Levy y Mazzaro se conocen hace casi tres décadas. El que luego fue jefe de la barra, por entonces, iba a comer a El Altillo, restorán que era de la propiedad de Levy, después de jugar al básquet en el club Huracán de San Justo. También compartían la tribuna de Almirante Brown. Allí comenzó la amistad.
Por esa causa, Levy estuvo preso 88 días y terminó en libertad con apenas una probation. Desde entonces comenzó a alejarse de los paraavalanchas de la Bombonera.
Sin embargo, el actual presidente de Almirante Brown dio la nota, en medio del escándalo por la agresión de los hinchas de River al micro de Boca, en la previa de la final de la Copa Libertadores, al mostrarse en las tribunas del Monumental el 24 de noviembre.
Por entonces se habló de infiltrados de La Doce en Núñez y algunos hasta especularon con que todo había sido «armado» por parte de la barra de Boca. Pero el propio Levy salió a desmentirlo. Contó por redes sociales que fue a acompañar a su pareja, fanática del Millonario, y que ya lo había hecho en la final con Tigres, en 2015.
El año pasado, Levy volvió a su primer amor, Almirante Brown. En el club de Isidro Casanova tomó el poder de una de las facciones de la barra (hay una fuerte división en la hinchada desde hace décadas) y se metió en el club en la secretaría de fútbol profesional y en enero de este año ganó las elecciones.
